sábado, 15 de septiembre de 2007


Me encantaría decirles que tienen los mismos derechos de los muchachos, pero si les enseño eso les va a ir mal: Se lo van a creer y el día en que agarren a besos a uno porque ustedes tienen ganas, el las va a descalificar y las mirará en menos por encontrarlas disponibles, aunque él también haya sido criado por una mujer a quien este sistema deje perpleja como a mi. Claro, ya de grandes…grandes, grandes quiero decir podrán vengarse y hacer lo que quieran. Pero en la adolescencia no!


Marcela Serrano.
El albergue de las mujeres tristes.